En Paraguay, cada 01 de agosto se recuerda el Día del Abogado, en conmemoración a su Santo Patrono, Alfonso María de Ligorio. En este contexto, Johana Giménez, Abogada, Notaria, Escribana Pública y Docente de la Universidad Politécnica y Artística del Paraguay (UPAP) Sede Central, habló del compromiso de esta profesión con la sociedad.
La catedrática se desempeña en las cátedras de Medicina Legal I y II, además de colaborar para diferentes carreras, entre ellas Abogacía, Ciencias Empresariales, Lic. en Criminología y Criminalística.
“Los abogados cumplen un rol esencial en la sociedad. Tienen la misión de tutelar el valor de justicia, velando por los intereses de los ciudadanos, a quienes representan y desde una óptica más amplia resguardan con su labor la vigencia misma del Estado de Derecho, el patrimonio, la libertad y un sinfín de derechos fundamentales”, expuso.
La experta manifestó que estos derechos están en manos de la pericia, técnica y experiencia profesional de los abogados y a su criterio, quienes ejercen esta noble profesión cumplen indudablemente con una función social. Por lo tanto, una vez que los egresados se introduzcan al ámbito legal, se espera que contribuyan a mejorar el sistema judicial.
“Los abogados desempeñan una labor fundamental en nuestro Estado de Derecho, pues son los profesionales que asesoran en Derecho a la ciudadanía, propician la resolución extrajudicial de los conflictos, en su caso, defienden en cada sede judicial los derechos e intereses de sus clientes”, apuntó.
Estudiar en la UPAP
Según la profesora, la importancia que implica estudiar la carrera de Abogacía en la Universidad Politécnica y Artística del Paraguay (UPAP), radica en la comprensión del conjunto de normas que rige y regula la conducta de las personas, tanto naturales como jurídicas. El egresado sabrá tener argumentos legales para poder defender a quien lo necesite y hacer respetar sus derechos.
“Al optar por esta carrera, se estará preparando para el futuro profesional, para ser una persona culta. El abogado es un profesional y está completamente capacitado para poder entender y apreciar los casos que se llevan a cabo en un proceso de un litigio judicial”, afirmó.
Igualmente, remarcó que las salidas laborales que se encuentren en el mercado van mucho más allá del clásico abogado. En efecto, la disciplina ha evolucionado y se ha diversificado con las transformaciones digitales y cambio del paradigma laboral, conforme a las demandas y necesidades de las empresas. Es así que fueron apareciendo nuevos perfiles laborales.
El abogado es capaz a su vez de auxiliar a una amplia gama de especializaciones, pudiendo ejercer desde el fuero civil, penal, laboral, constitucional, niñez y la adolescencia, tributario, internacional, entre otros.
Desafíos para el profesional
Para la abogada, ser estudiante de Derecho puede ser una experiencia desafiante desde la gran cantidad de información que deben aprender hasta la presión de las fechas, límites y los exámenes.
“Uno de los principales problemas que enfrentan los estudiantes de Derecho es la cantidad de información que deben aprender con numerosos casos de derecho, leyes y procedimientos legales para estudiar. A menudo se sienten abrumados y luchan por recordar toda la información”, comentó.
En otro orden, significó que la profesión de abogado puede llegar a ser una de las más importantes del mundo, dada la trascendencia.
“El abogado nunca deja de ser estudiante, pues seguirá siendo un estudiante independientemente de su edad y experiencia, debe conocer bien la sociedad en la que se desenvuelve, además de conocer los hechos, la evolución legal y de la jurisprudencia”, contó.
Por último, recordó que el ser abogado tiene su lado negativo, ya que habrá casos que se solucionen rápido, pero otros se dilatarán en el tiempo y aunque lo ideal sería una jornada de lunes a viernes para poder disfrutar del fin de semana, en ocasiones deberán trasnochar y pasar los fines de semana trabajando para sacar adelante un caso.