Estudiantes de Psicología, de la Universidad Politécnica y Artística del Paraguay (UPAP) Sede Central, llevaron alegría y solidaridad a los hijos de las madres asistidas por la Fundación Naho, en el marco de los festejos por el Día del Niño. Un total de 19 alumnos acudieron el jueves 29 de agosto a la organización en el Bañado Sur, para celebrar y compartir con los más pequeños.
El acto consistió en la entrega de juguetes, merienda, actividades lúdicas y dinámicas. A la actividad llegaron 60 niños y niñas, según informó la encargada de la cátedra de Psicología Preventiva de la UPAP Sede Central, Lic. Patricia Escurra, quien lidera esta iniciativa.
Si bien, el Día del Niño se recuerda en Paraguay cada 16 de agosto, en memoria de los mártires de la Batalla de Acosta Ñu, las circunstancias climáticas condujeron a que el festejo previsto se desarrolle el 29 del corriente, según la catedrática.
“Fue un gran éxito nuestro Día del Niño, tuvimos una asistencia de 60 niños, entre bebés y niñas, todos recibieron regalos, premios. Hubo chocolatada, galletitas, todo lo que se les podía brindar, es más, una de mis alumnas se encargó de hacer cupcakes, hizo 60 cupcakes. Ellos pudieron jugar con los niños, compartir con ellos, hicieron caritas pintadas, les hicieron pintar dibujos con crayolas, socializaron, fue un evento hermoso. Las mamis se involucraron también atendiendo a sus chiquitos”, ilustró.
Aprendizaje integral
La profesional agregó que esta experiencia de socialización de los estudiantes de la UPAP con los niños, deja un aporte significativo para el aprendizaje interpersonal al tener contacto con un entorno real y no solo desde el punto de vista riguroso y técnico. Así, se genera confianza comunitaria entre todos.
“Siempre nosotros estamos compartiendo en talleres y los niños están a veces también ahí. Y es diferente porque nosotros estamos más enfocados en llegar a las mamis. Al momento de nosotros festejar el Día del Niño, nos hace llegar a lo que es más importante para ellas, que son sus hijos. Para nosotros, ellas son importantes, pero sus hijos también”, expuso.
Por otro lado, señaló que aunque desde hace tres años realizan las visitas a la Fundación Naho, la dinámica cambia anualmente con respecto al grupo de mujeres. “Eso es lo que más enriquece todavía la actividad, porque cada año tenemos grupos nuevos de mamis. Cada año es un conocimiento nuevo y cada año son madres diferentes con necesidades diferentes”, resaltó.
En efecto, consideró que este intercambio conlleva a un desafío y aprendizaje fructíferos. Destacó además la libertad que le otorga la universidad para planificar esta actividad extracurricular que busca el desarrollo integral de los estudiantes en el proceso de formación profesional.
“En todo momento ellos están aprendiendo y yo también, porque a medida que nos vamos allá, que estamos trabajando allá, a medida que estamos haciendo este tipo de actividades, nosotros estamos aprendiendo algo diferente porque son situaciones que implican que ellos salgan de la rutina”, manifestó.
La Fundación Naho se enfoca en asistir de manera multidisciplinar a jóvenes madres de escasos recursos, de entre 15 a 30 años, provenientes del Bañado Sur. La organización se ocupa de brindar educación, orientación vocacional y asistencia psicológica a las madres, contribuyendo de este modo a prepararlas para su futuro e inserción plena en la sociedad.
