Desde diferentes perspectivas del área de la salud, especialistas nacionales e internacionales de Chile, Perú y Argentina hablaron sobre la gestión interdisciplinaria del COVID-19 en el V Congreso Internacional Triple Frontera, impulsado por la Universidad Politécnica y Artística del Paraguay (UPAP) a partir de su proyecto Jahecha: Educar para prevenir.
El evento educativo en su quinta edición contó con una amplia participación virtual de estudiantes, profesionales e interesados en general en sus tres fechas, en las cuales fueron propuestos tres ejes temáticos para el abordaje de un tema tan relevante y de gran impacto en nuestro país y el mundo, el COVID-19.
La tercera y última jornada arrancó con la ponencia de la Mgtr. Blanca Aguilera, especialista en Educación Inclusiva quien se refirió a la situación que genera para los padres y el recién nacido el hecho del nacimiento en pandemia, la importancia de la protección y el apego en estos tiempos.
Señaló que la llegada de un nuevo integrante a la casa de por sí es un cambio, pero en pandemia el mismo llega con mayor fuerza, por lo que es necesario extremar los cuidados. “En el caso de que la madre del recién nacido resulte positivo al COVID-19, no se suspende la lactancia materna, siempre y cuando la madre no se encuentre en estado grave, pero siempre respetando estrictamente las medidas de bioseguridad”, explicó.
“El apego es muy importante, afecta de manera favorable al neurodesarrollo del recién nacido, por eso es necesario realizarlo, queda en la memoria del niño. Los bebés reconocen la voz de mamá, de papá, los diferentes sonidos, y, por ende, sienten los estados de ansiedad, impotencia y de temor de los padres, ya sea por miedo al contagio y el querer volver a casa lo antes posible”, indicó.
Seguidamente el Dr. Diego Fleitas, director del Centro Integral de la Obesidad y Diabetes de la ciudad de Encarnación, destacó la importancia de brindar la atención que se merece a la diabetes como una enfermedad silenciosa, cuyo factor de riesgo para desarrollar una forma grave de COVID-19 ha sido ampliamente comprobada por estudios médicos recientes.
“Hoy sabemos cosas que realmente impactan, estamos hablando de una enfermedad sistémica, empezamos a entender que la obesidad era la madre responsable de muchas otras patologías, a estudiarla de otra forma y darle el lugar que corresponde”, ratificó.
«La obesidad es y está demostrado que es un factor de riesgo para contraer este coronavirus, así que debemos enfocarnos a combatir esto que, no solo a nivel orgánico, afecta todo, en especial a nivel mental y la autoestima, genera ansiedad en gran nivel, afecta a nivel emocional y sentimental a la persona que la padece”, indicó.
Por su parte, la Dra. Daniela Toro, investigadora y académica de la Universidad Autónoma de Chile, acercó al auditorio virtual a una actualización de la biología de SARS-COV-2.
Explicó además que la ventaja de este virus es que puede ser eliminarlo de manera muy fácil, con el lavado de las manos con agua y jabón, utilizando alcohol, además de la prevención con el uso de las mascarillas.
“Es muy importante conocer todos los ciclos replicativos del virus, porque eso nos permite bloquearlos, tenemos muchas células que pueden ser hospedadoras de este virus en nuestro cuerpo, con el paso del tiempo se ha visto que se ha generado una mutación, generando más infecciones con esta última que con el virus original”, expuso.
Al ser consultada si los países en los que prevalece el clima caluroso la mayor parte del tiempo pueden considerar eso como una ventaja, señaló que, según estudios, a una temperatura más baja el virus se va mantener más tiempo, en tanto, a 40° no quiere decir que el virus se va a destruir, pero si es posible que se mantenga por menos tiempo en una superficie.
“Hay un estudio reciente que indica que la inmunidad de la persona puede durar hasta un año, pero todavía falta muchos estudios para asegurarlo, si una persona se infectó por primera vez de manera agresiva es probable que una segunda infección se más leve”, comentó.
“Este no será el último virus al que vamos a enfrentarnos, por lo que debemos aprender de esta pandemia cómo cuidarnos, no debemos olvidar que aún es muy poco el conocimiento sobre el SARS-COV-2. Nosotros no podemos bajar la guardia, tenemos que seguir usando mascarilla, lavarnos las manos, evitar lugares con mucha gente, y no debemos olvidarnos de los otros virus, que también se previenen de la misma forma”, acotó.
En el marco de su presentación, el Dr. Nicolás Cifuentes, profesor asistente de la Universidad Autónoma de Chile compartió en detalle las generalidades de las vacunas, tipos de vacunas y ejemplos de vacunas para SARS-COV-2.
También hizo referencia a los factores necesarios para medir la eficacia de una vacuna, la carrera por la vacuna del coronavirus, vacunas de RNA mensajero, vacunas de virus inactivado, vacunas basadas en vectores virales y otras vacunas candidatas.
“La ciencia ha logrado avanzar a niveles que no imaginamos, ¿qué se hace con esta información?, se hace un descubrimiento, se propone un nuevo prototipo de vacuna, se pasan por varios ensayos y participan miles de voluntarios, luego pasa al periodo de etapa regulatoria”, expuso.
“Contra todo pronóstico probablemente tengamos una vacuna a finales de este año y principios del año siguiente, pero existe el temor de lo que podría suceder uno o dos años después de estar vacunados, que sucederá a largo plazo. La gente no tiene problemas con vacunarse, si de hacerlo primero, siempre hemos dicho que es improbable tener una vacuna en menos de dos años y ahora lo estamos por lograr en un año, de ahí el temor”, sancionó.
El cierre de esta edición estuvo a cargo del Dr. Gino Corsini, director del Instituto de Ciencias Biomédicas en la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad Autónoma de Chile, quien hizo una aproximación a datos relevantes sobre la detección del coronavirus en tiempo de pandemia y como realizaron.
Señaló que en conjunto con otras instituciones crearon un laboratorio para la detección de este virus. “Para hacer diagnósticos del SARS-COV-2 necesitábamos al menos cinco dependencias, se necesitan al menos cinco pasos, nosotros montamos un sistema manual, hay otros laboratorios que tienen sistemas semimanual y otros que tienen sistemas totalmente automatizados”, indicó.
“Una vez que tuvimos la aprobación del laboratorio, ya contábamos con el espacio y las personas, pasamos por una certificación, y establecimos contacto para ofrecer los servicios, hemos hecho casi 17 000 análisis, posteriormente nuestro laboratorio cerró y reiniciamos nuestras actividades de investigación”, exteriorizó.
“Nuestras primeras muestras partieron en abril y la última en setiembre, desde finales de abril y finales de junio fue donde notamos mayor alza en cantidad de casos positivos, en el caso de Paraguay la mayor cantidad se mostró en agosto, y existen factores que influyeron en ello, Chile tardó mucho en cerrar sus fronteras, cosa que Paraguay lo hizo bien y a tiempo”, concluyó.
De esta manera finalizó el V Congreso Internacional Triple Frontera, con más de 3000 inscriptos, la actividad académica virtual se desarrolló a lo largo de tres jornadas integrando conocimientos, experiencias y resultados de estudios realizados en varios países del mundo en relación al COVID-19.
El espacio fue impulsado a partir del proyecto institucional Jahecha: Educar para prevenir orientado al desarrollo de acciones en el ámbito de la responsabilidad social, la consolidación de la investigación, el fortalecimiento de la extensión universitaria y el avance del conocimiento.